• La formación naranja propone un leasing financiero «que tiene unos intereses por debajo del 2 por ciento» y ahorraría 1 millón de euros a partir del primer año.

Ciudadanos León ha mostrado su disconformidad con la encomienda que el Ayuntamiento de León quiere realizar a la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) para la ejecución del proyecto de eficiencia energética en las instalaciones de alumbrado público de la ciudad.

La formación naranja considera que este acuerdo tiene unas condiciones «leoninas» para los leoneses y culpa al equipo de gobierno de no haber tenido la suficiente previsión para gastar medios humanos en un contrato de Somacyl «que quizás no merecía la pena».

La portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de León considera que, una vez estudiado a fondo el convenio, no están de acuerdo con el por cuatro motivos: La financiación lleva demasiado interés, ya que se situaría en el 2,7 por ciento; el 10 años que dura el convenio, solo se ahorrarían 10.000 euros por año, algo que ven como «irrisorio y sangrante»; el Ayuntamiento de León perdería el control del alumbrado durante 10 años «algo que no nos podemos permitir», por lo que Gemma Villarroel rechaza «quedarnos sin competencias en toma de decisiones tan importantes como la eficiencia energética»; y por último, creen que el acuerdo con Somacyl «no refleja por ningún lado el loteado de las partidas, y nos debemos fiar de las buenas intenciones».

Ciudadanos León tampoco cree que la propuesta del PSOE, la contratación a través de una Empresa de Servicios Energéticos, pese a que cumple en cuanto a transparencia con los requisitos de salir a concurso y puede tener circunstancias razonables: «nos asusta que una vez concedida la contratación a la ESE ella procede a la instalación de los servicios de alumbrado y la instalación, por lo que para las pymes y el tejido empresarial de la provincia puede ser malo, por ahogar el presupuesto de las subcontrataciones».

Una propuesta con muchas ventajas

Por todo ello, la formación naranja propone un leasing financiero, que no se considera una inversión, se considera un gasto y «no incumpliríamos en endeudamiento ni incumple la regla de gasto».

Gemma Villarroel considera que como el Ayuntamiento de León está al orden del día en pagos, «sacaríamos a concurso a entidades financieras para optar a ese leasing». Además, este tipo de contratación sitúa el interés «por debajo del 2 por ciento, que es bastante más de lo que ofrece el Somacyl».

Por otra parte, Ciudadanos León asegura que el Ayuntamiento, con esta fórmula, mantendría el control del alumbrado público y sacarían a concurso público el loteado en unidades autónomas «algo que es legal y propio para que el tejido empresarial tenga opciones de optar a estos concursos».

Otra de las ventajas sería que el alumbrado, tras la instalación que duraría un año, tendría un ahorro del 50 por ciento. «Ahora pagamos 2 millones de euros, y se ahorraría un millón».

Ciudadanos ha valorado también realizar la gestión en «2 ó más operaciones financieras», pero la posición que tienen es clara y quieren que se conserve el control de la eficiencia energética sin vulnerar la ley de endeudamiento.

Ciudadanos pide el apoyo de las fuerzas políticas

Gemma Villarroel ha anunciado que en caso de que el Consejo Consultivo diera luz verde a la consulta del equipo de gobierno: «Deberíamos volver a sentarnos con Somacyl para decirles que no es un buen convenio, que no estaríamos de acuerdo con ellos y que no lo apoyaríamos».

La formación naranja anima a las fuerzas políticas a sacar adelante esta propuesta de leasing financiero, porque han estudiado todo a fondo, hablando con entidades, y han pedido un informe a Intervención para que nos confirme que no quebrantan la Ley de Gastos. «Es una tercera vía que se puede llevar a cabo y los propios beneficiados vamos a ser el Ayuntamiento y los leoneses».

El coste del proyecto será de entre 9 y 11 millones de euros de inversión más los intereses. Lo normal para las administraciones es que el leasing conceda unos intereses al 1,31 por ciento, lo que se llama prudencia financiera, pero es difícil que sea esa cantidad, aunque siempre permanecería por debajo del 2 por ciento, «muy por debajo de lo que ofrece Somacyl», para un pago que sería de 10 años.

Gemma Villarroel da rueda de prensa /